A la pobre Cris los azotes que le dá el pervertido de su amo le hacen de llorar. Así es la dominación dura del BDSM, que hasta que no te vean con las lágrimas en los ojos no paran de darte caña. Eso si, en el fondo le gusta a la cabrona. Esto es de lokos !!
849]
You must be logged in to view or write comments.